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¡Espera! ¡No es lo que piensas!

Aunque el expresidente alega que es “un genio muy estable” (“a very stable genius”), no quiero hablarte de su inteligencia, o de su astucia para los negocios, o de su amplio conocimiento de la política internacional. Te quiero hablar de otro aspecto sobresaliente de Donald Trump.

Hay algo que siempre he reconocido como “genial” sobre Trump (te incluyo la definición de esa palabra según la RAE ¡por si acaso!). Me refiero a su habilidad para comunicar.

Puede ser que no coincidas con sus ideas políticas, o no apruebes su estilo de vida, o no soportes su personalidad… o puede que sí.

Pero Donald Trump, aunque no era un político “tradicional”, ha estado gran parte de su vida frente al ojo público. Y siempre ha usado esto a su favor. Trump se ha encargado de promocionar su marca/apellido cada vez que tiene la oportunidad. Entrevistas, reportajes, noticias sobre sus matrimonios y divorcios, y hasta su cameo en la película Home Alone 2. Trump siempre busca ser visto. Y hay que recordar las catorce temporadas como anfitrión del programa de TV The Apprentice. Solamente con esa experiencia, y toda la preparación que debe haber recibido, Donald Trump es posiblemente el político con más experiencia ante las cámaras y los medios de comunicación de toda la historia.

Quiero presentarte tres aspectos de las destrezas de comunicación y oratoria del expresidente que demuestran su genialidad. Y no quiero hablar de sus ideas, ni de sus valores… solamente de cómo llegó a ser el líder de la principal potencia mundial usando sus destrezas de comunicación. Aunque no voté por él (en Puerto Rico no votamos por el presidente de E.U.A.) reconozco sus destrezas de comunicación. Y podemos aprender mucho de él si podemos “separar el grano de la paja”.

SUS MANOS

Aunque el tamaño de las manos del expresidente es motivo de bromas y controversias, quiero referirme a su dominio del lenguaje corporal. Y obviamente a cómo usa sus manos.

Trump mueve y muestra sus manos de una manera peculiar: por lo general muestra sus palmas hacia el frente, manos abiertas, buscando demostrar que “no tiene nada que ocultar”.  Tal vez en alguna ocasión señala con el dedo o cierra su puño cuando se agita. Pero normalmente sus manos siempre están abiertas, palmas al frente, buscando demostrar apertura. Tanto es así que es una de sus características que, junto a su voz, muchos comediantes e imitadores incorporan para recordarnos a Trump.

El lenguaje corporal comunica constantemente, aunque no hablemos.

El lenguaje corporal comunica constantemente, aunque no hablemos. Se puede aprender a utilizar de manera intencionada nuestras manos, gestos, ademanes, postura. Además, nuestro lenguaje corporal mejora cuando prestamos atención y cuidado a nuestra salud física, mental y emocional.

EL HUMOR

Muchas veces escucho a Trump en discursos de campaña política y no sé si quiere dedicarse a la política o al standup comedy (comedia). Si la comedia le generara mucho dinero, me atrevo a apostar que se dedicaría a esto a tiempo completo.

Trump abusa de la burla, los sobrenombres y los insultos. Pero a su audiencia le fascina, se ríen de sus chistes y lo disfrutan un montón. Incluso cada vez que se burla de alguien o bromea sobre alguna situación, consigue más publicidad y tiempo de los medios de comunicación, aún de los que no le favorecen.

Cada vez que reímos juntos eliminamos barreras y conectamos mejor.

El buen humor es un recurso valioso para conectar con cualquier persona o audiencia. Cada vez que reímos juntos eliminamos barreras y conectamos mejor. Podemos aprender a usar el humor para nuestro beneficio, aunque no seamos comediantes… o políticos.

SU AUDIENCIA

Trump conoce bien, y conecta con su audiencia. Es evidente que ha cambiado su estilo de comunicación al pasar el tiempo y afianzar su audiencia, sus seguidores políticos. Cada vez es menos cohibido y más atrevido en lo que dice. El uso del humor y las burlas es cada vez más intenso y frecuente.

Hay expertos que indican que su vocabulario, sintaxis y mensajes tienen una complejidad equivalente a la usada por niños de cuarto grado de escuela elemental (primaria). Trump usa palabras sencillas, cortas… incluso se enreda y confunde cuando usa palabras complicadas o más “rebuscadas”. Y contrario a lo que mucha gente pueda pensar, esto no es un problema para su audiencia; es una ventaja para Trump. Es muy conocido la lealtad de sus seguidores MAGA, que incluso algunos clasifican como un culto.

Además, Trump comparte y repite muchas ideas y teorías conspirativas que sus seguidores creen. Cada vez que habla sobre alguno de esos temas, sus seguidores sienten una afinidad, una conexión con ese líder que les entiende y piensa como ellos.

Debes conocer a tu audiencia. Y hablarles en un estilo que ésta te entienda y conecte contigo.

RESUMIENDO…

Puede que no sientas respeto, admiración o afinidad con el expresidente (o puede que sí). Pero no podemos negar que ha sido exitoso, pues alcanzó una de las metas más difíciles de alcanzar: ser el presidente de los Estados Unidos de América. Y para esto, ha optimizado y expandido sus destrezas de comunicación. Independientemente de la opinión que tengamos de Trump, podemos ver claramente cómo su lenguaje corporal, el uso del humor y el conocimiento de la audiencia le han ayudado a alcanzar lo que algunos pensaron era imposible.

Y que tal vez lo pueda repetir…

Posdata

Hablar ante un público incluye incorporar y practicar técnicas y aspectos que pueden parecer “mecánicos”, “ensayados”, “poco auténticos”. Pero si se aprende de la manera correcta, mejorar tus destrezas de comunicación puede ser un proceso de transformación profunda. Ese ha sido mi caso… Y lo que descubrí en este camino le llamo el Método K.E.Y. (The K.E.Y. Method). Es un método para aprender oratoria sin limitarte a los cambios “cosméticos”, “ornamentales”, “superficiales”. Descubre el gran tesoro que llevas dentro de ti, adquiere autoconfianza y lleva tu mensaje al mundo.

Envíame un mensaje para explicarte mejor el Método K.E.Y.

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